En la actualidad con el encarecimiento de la vida en cualquier aspecto, a la hora de elegir cualquier tipo de destino de vacaciones (contando conque podamos disfrutar de las mismas) intentamos recortar gastos desde el mismo momento en el que hacemos la reserva de avión.
Por este simple hecho es por el que compañías como Ryanair están logrando ponerse a la cabeza de las aerolíneas preferidas por los usuarios, quienes prefieren hacer escapadas con estas compañías a sabiendas de que deberán reunir una serie de condiciones para que al precio tan reducido del billete que han adquirido (generalmente por internet) no se les empiece a sumar de manera sorpresiva los costes de facturación y demás que solo incluye su plaza en la cabina del avión.
Estas compañías, por línea general, admiten un bulto por persona de unas medidas que establece cada una de ellas, que se adapta al tamaño de los compartimentos que hay habilitados al efecto en las cabinas de los aviones, justo encima de los asientos de los pasajeros (portaequipajes).
En el caso de Ryanair las medidas son 40 x 55 x 20 cm (ancho x alto x profundo) siendo bastante rigurosos en la exigencia que hacen hacia el pasajero sobre el cumplimiento de las mismas.
Si cumplimos este pequeño requisito con respecto al equipaje, así como en otras condiciones referentes a la facturación, podemos disfrutar de precios en nuestro billete bastante asequible en comparación con el resto de compañías que no ponen este tipo de requisitos.
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